No hay absolutos en el teatro, por naturaleza por cada idea o respuesta hay otras contradictorias. Es a decir, el teatro y de hecho el taller tendrá mucho de búsqueda, encuentro de ideas, experimentación y todo con un propósito claro e importante, sacar lo mejor del actor. No vamos a poner el personaje en el actor sino encontrar aquella faceta del actor que coincide con el personaje.
Mi trabajo, deja libertad al actor, jugar y equivocarse para después seleccionar lo que es verdad. Liberar al actor para que pueda pensar y reflexionar y así aprovechar su propia creatividad. Después, juntos seleccionar la verdad del texto, del movimiento y del personaje.
No hay una única manera de interpretar un texto. Lo importante es crear un ambiente de creatividad en que el actor pueda trabajar y ofrecerle oportunidades e inspiración.
El taller va a ser coral. Es a decir, que cada actor va estar implicado en el trabajo del otro; un actor interpretando su texto y los demás compartiendo sus pensamientos, emociones y palabras
Vamos a trabajar con textos seleccionados entre todos y todas, Los textos tienen que ser potentes y de grandes autores desde Sófocles a Pinter; desde Calderón a Valle Inclán.
Estamos buscando una interpretación: sincera, clara, musical, original, divertida (con risas o con lagrimas) y al final una fusión entre intenciones, emociones y personaje.
El control del aliento es la clave porque si eso está afinado y en el punto correcto de tono, ritmo, intensidad y pasión, entonces las intenciones y las palabras saldrán claras y comunicaran el conflicto y la historia contenido en el texto.
El actor tendrá la libertad de equivocarse y de buscar, encontrar y seleccionar. Trabajaremos con la voz, pero no de una manera aislada. El pensamiento es una acción física y es el gatillo que dispara emoción y movimiento. Cuando encontremos tendencias en el actor que le conducen a una emoción e interpretación falsa, intentaremos controlarlos porque son muros entre la verdad y la credibilidad.
¿De que tendencias estamos hablando? Pues por ejemplo: correr demasiado con el texto, hablar sin pensar, el control de las pausas u olvidar la importancia del silencio, texto interior sin palabras, el texto sin sonido. Eso es, encontrar la voz interior del personaje.
Como escenario y espacio de actuación y a la vez momento en el tiempo voy a plantear el tema Una noche de verano de locura y colocar la acción dentro de este panorama. Juntos vamos a crear un pequeño drama en que cada actor pueda buscar y expresar a través de su texto y personaje unos momentos de verdad y de poesía.
Denis Rafter
Fechas:
19 al 30 de noviembre del 2012.
Horarios:
Lunes a Jueves de 10:00h a 15:00h
Número de participantes:
18 participantes
Precios:
Afiliados: 160 €
Afiliados parados de larga duración: 120€ (presentar la tarjeta del INEM con antiguedad de un año)
No afiliados: 250 €
Inscripciones: (fuera de plazo)
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Denis Rafter es irlandés y se formó como actor en el Abbey Theatre, Teatro Nacional de Irlanda y en el Guildhall, la prestigiosa Escuela de Música y Drama de Londres, donde también se licenció como Profesor de Voz y Drama. Es doctor en Teoría, Historia y Práctica del Teatro por la Universidad de Alcalá de Henares (Suma Cum Laude, Premio Extraordinario).
Ha vivido gran parte de su vida en España, trabajando en diferentes aspectos del teatro. Como director se ha hecho cargo de más de cincuenta obras incluyendo a los clásicos españoles, ingleses e irlandeses y a los autores contemporáneos. Fue nombrado comisario general de Irlanda en la Expo 92 de Sevilla por el Gobierno de su país, ofreciendo al mundo lo mejor de la cultura irlandesa.
Durante tres años ha sido maestro de actores con la Compañía Nacional de Teatro Clásico. Ha dirigido y colaborado en varias ocasiones con el Centro Nacional de Teatro Clásico.
Es autor de varios monólogos, entre los que destacan The Remarkable Oscar Wilde, O’Shakespeare y Ser actor. Ha versionado a Brian Merriman (The Midnight Court), James Joyce (Ulises), Dickens (Canción de Navidad) y a varios autores irlandeses en su Antología del amor. Como actor ha trabajado en cine, televisión y teatro. Destacan sus papeles en obras de Synge, O’Casey, Stoppard, Chéjov, Simón, Carroll, Wilde y Shakespeare.
Con sus proyectos ha viajado por medio mundo y participado en varios festivales internacionales, entre los que destacan el Festival de Edimburgo donde se alzó con el Premio al Mejor Actor de Monólogos, Mérida, Elche, Almagro, Sitges y Waterford, donde ganó el Premio al Mejor Bailarín. Sus trabajos sobre Shakespeare son admirados por su profunda comprensión de los personajes y la honestidad y singularidad de sus puestas en escena. Es autor del libro Hamlet y el actor.
En la actualidad dirige La decisión de John, de Mike Bartlett con la compañía Teatro del Noctámbulo de Badajoz que se podrá ver en el Círculo de Bellas Artes a finales de noviembre.
En la última edición del Festival de Mérida, ha dirigido con éxito de crítica y de público la obra Áyax de Sófocles con versión de Miguel Murillo y música de Roque Baños.
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