La estación de Atocha acogió a las 13:00 el décimo aniversario de recuerdo a las víctimas de los atentados del 11 de Marzo. Junto a las esculturas de Antonio López, se produjo una ofrenda de claveles rojos. Iñaki Guevara, Secretario General de la Unión de Actores de Madrid y de Pilar Manjón, Presidenta de la Asociación 11-M Afectados por el Terrorismo, iniciaron el acto junto a los Secretarios Generales en la Comunidad de Madrid de UGT y CCOO, José Ricardo Martínez y Jaime Cedrún. El sol caía sobre los asistentes mientras se iban desgranando los 192 nombres de las víctimas. Iñaki Guevara hizo una reflexión acerca de las dificultades a las que nos somete por sorpresa la vida con su emotiva reflexión Los dioses prueban a los que aman.
La vida, indiferente al dolor
“La muerte no tiene ningún sentido”, empezó Guevara. “Aunque se trate del futuro ineludible de todo ser vivo, la muerte no tiene sentido. La de un ser querido tiene, además, el terrible y trágico efecto de darle todo su sentido a la vida. Ellos se alejan y nosotros permanecemos para llorarlos. Hay muchas cosas, sobre todo las importantes, que no sirven para nada. No hay que buscarles utilidad próxima o inmediata, simplemente han ocurrido y no han servido para nada. También hay cosas que no tienen remedio, por más que se lo busquemos no lo tiene. Simplemente han ocurrido y no han servido para nada.
También hay cosas que no tienen remedio, por más que se lo busquemos no lo tiene. Simplemente hay que aceptar que pasan cosas y algunas de ellas nos golpean muy fuerte.
Pero que las cosas no tengan sentido ni sirvan para nada, ni tengan remedio, no significa que no tengan una causa próxima y remota, que no tengan autores intelectuales y materiales o que no tengan consecuencias inmediatas e incalculables.
La vida no tiene nada de justa ni de injusta, es indiferente a nosotros. Y somos nosotros los que le dotamos de dignidad al aceptar los acontecimientos cuando estos llegan sin haber sido invitados.
Hace diez años fuimos golpeados salvajemente como comunidad a consecuencia de la sinrazón y de la injusticia y, sobre todo, algunos miembros de esta comunidad fueron heridos en sus personas de las formas más vívidas, sin sentido, utilidad ni remedio.
Como todos los años queremos estar juntos para confortarnos y recordar que los dioses prueban, sobre todo, a los que aman”. Así cerró el discurso el Secretario General de la Unión de Actores y Actrices. Y es cierto ya que, como explicó Pilar Manjón es injusto que haya un plan de reinserción para los verdugos pero no para las víctimas. “El 60 por ciento de los socios de la asociación está parada y, muchos de ellos sin cobrar si quiera los 400 euros”, manifestó, recalcando que las subvenciones para las víctimas de terrorismo han disminuido y que su "vida cotidiana" consiste, entre otras cosas, en “evitar desahucios”.